El Siglo XXI es el Siglo de la revolución tecnológica. En menos de 15 años hemos cambiado la forma de comunicarlos unos con otros. Ahora nos parece inconcebible vivir sin Internet, sin las Redes sociales como WhatsApp o Twitter. La generación del móvil no entiende cómo nos comunicábamos hace 15 años.

Puede que dentro de varios siglos hablen que la revolución tecnológica fue de las más importantes de la historia, que cambió la forma de comunicación. Pero también dirán: como siempre el poder y las ganas de manipular ganaron la batalla a la tecnología.

Nos creemos que por tener todas las herramientas tecnológicas en nuestras manos tenemos una mejor calidad de vida, y estamos más informados que nunca. Y yo digo que ni una ni otra. Como dije hace tiempo, nos estamos volviendo esclavos y obsesivos de las Redes sociales.

Tenemos tanta información al segundo que nuestro cerebro no es capaz de asimilarla. Ni siquiera estamos capacitados para recepcionar toda la información, por mucho que estemos en Twitter, Facebook, Instagram, o cualquier Red social que se precie. Poseemos mucha información, pero tenemos un grandísimo problema: cual es real y cual inventada o exagerada.

Cada día salen supuestos estudios de las universidades que nadie ha escuchado hablar, y las redes sociales le dan difusión. Los medios de comunicación informan en los noticiarios y en sus rotativos de noticias que ni siquiera se molestan en confirmar. ¡A todo se le da una veracidad increíble!

Es curioso que en la era de las telecomunicaciones estemos más desinformados que nunca. No sabemos qué noticia es verdad ni cual inventada. Simplemente “como lo dice Twitter” o “lo dice tal periódico” o “ha salido en la TV”, ya nos lo creemos.

De esto se aprovechan los gobernantes, empresarios, banqueros, etc. para inculpar o dar información falsa de su competencia. Esto se ha convertido en una guerra psicológica de cómo hundir o torpedear la información. Y pasa cada día, en todas las redes sociales.

Para poder intuir lo que ha pasado sobre incidente, tienes que leer la noticia en distintos periódicos. Pero nunca sabemos la realidad, porque cada medio de comunicación tergiversa la noticia, pone o quita datos según intereses creados. De forma que cada periodista da su visión sobre ese incidente. Y es entonces cuando deja de ser una noticia para convertirse en una opinión del periodista.

Es una lástima que teniendo toda la tecnología en nuestras manos y podamos estar informados al segundo, haya más manipulación que nunca. Es la Era de la Desinformación programada.

Aaaadiós

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La vida hay que verla desde el lado positivo y optimista, por eso siempre busco todas las oportunidades que nos ofrece nuestro día a día, ya que una persona con ganas e ilusión consigue sus metas en la vida. Soy una persona extrovertida, que disfruta viajando y conociendo nuevas culturas. Me encanta jugar al tenis, correr, hacer senderismo y he hecho 2 veces el Camino de Santiago en bicicleta de montaña.

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