El daño que están haciendo los políticos españoles del S.XXI es enorme. Todo lo que hicieron los políticos de la Transición, en unos momentos terriblemente difíciles, estos nuevos políticos lo han tirado por la borda.
Se está volviendo a Izquierdas y derechas, a antisistemas y corruptos, a señoritos y curritos
Con todas las dificultades políticas y sociales que había a finales de los 70, los representantes políticos tuvieron la virtud de mirar por España y la unión de los españoles. Y decidieron mirar hacia adelante. Para ello llegaron a acuerdos inconcebibles, a negociaciones impensables. Y absolutamente todos cedieron en sus posturas para que España avanzara hacia un futuro prometedor.
Desde aquel que decía que España iba bien, pasando por el que decía “¿Crisi? ¿Qué crisis?”, el otro que no se entera que todos sus compañeros son unos corruptos, y terminando por el señor NO. La clase política de este País ha devuelto a los ciudadanos aquellas palabras y conceptos casi olvidados por los niños de la posguerra y que las generaciones de los 70, 80 y 90 casi ni conocíamos, más que por los libros de historia.
Se está volviendo a Izquierdas y derechas, a antisistemas y corruptos, a señoritos y curritos. La agitación social se está poniendo de tal manera que si nadie lo remedia… Porque “Cuando los que mandan pierden la vergüenza, los que obedecen, pierden el respeto” (Georg Christoph Lichtenberg)
No puede ser que cualquiera pueda representar a los ciudadanos. Habría que exigir preparación, experiencia, formación, imagen, etc. a aquellos que quieran ser nuestros representantes. Ya no se respeta nada, y lo que es peor, se está dejando que los antisistemas que defienden a asesinos y encapuchados, que no cumplen las leyes, salgan de rositas. Insultan a diestro y siniestro, diciendo que es libertad de expresión, pero si tú dices algo distinto, te tachan de facha, de falta de repeto…
La gran mayoría de los españoles somos de centro, unos más de izquierdas, otros más de derechas, pero con intenciones de llegar a acuerdos. Pero estos últimos años parece que los representantes nos están llevando a una radicalización de la sociedad. Parece que les interesa que nos peleemos entre nosotros, que revolvamos nuestro pasado, que no avancemos.
Entiendo que a los radicales acomplejados les interese, pero ¿a los demás políticos? No creo que quieran eso. Simplemente no están preparados, no saben gestionar, no tienen experiencia, no…, no… Y los que pagamos somos los ciudadanos de a pié.
Las consecuencias del “España va bien” nos llevó a una gestión nefasta de la crisis. ¿Y todo esto de ahora adonde nos lleva? Tristemente lo veremos en unos años… Que Dios nos coja confesados
Aaaadiós
