El momento de decidir qué quiero estudiar o qué quiero ser le llega a todo el mundo, antes o después hay que decidirse y esta decisión se suele tomar a una edad en la que no somos los más seguros ni más asertivos para hacerlo de la manera más correcta.
Pero los jóvenes no están solos en esta decisión, siempre se van a encontrar con el apoyo o “presión” de sus padres que los acompañarán a tomarla. En cualquier caso, éstos quieren lo mejor para sus hijos y aunque a veces, tanto amor pueden confundir el momento de elección profesional, siempre habrá sido con la mejor intención.
Pero no es esta la única variable que afecta de manera determinante en esta elección, si echamos la vista atrás y recordamos cuando sólo teníamos dos canales de televisión, existen muchas “casualidades” que pudieran estar relacionadas con un incremento de vocaciones en profesiones altamente representadas en lo que veíamos por la tele.
De hecho, en los años 80 hubo un incremento notable de jóvenes que decidieron estudiar turismo, justo en los años en los que triunfaban series como Hotel o Vacaciones en el mar.
En los años 90, y ya con televisiones privadas, no había canal que no emitiera una serie llena de médicos y enfermeras a los que les pasaba de todo y con unas vidas muy interesantes y aquí ya se apuntaban la producción española de Hospital central y Médico de familia o la americana Urgencias. Este hecho coincide con un incremento en la demanda de jóvenes que quisieron estudiar medicina o enfermería.
Cada vez que una serie de periodistas o del mundo de la comunicación ha triunfado en la televisión, se han incrementado las vocaciones de futuros periodistas o publicistas, ya ocurrió en los 70 con Lou Grant en los 90 con la serie española Periodistas y más recientemente con B&B y la americana Newsroom.
Nos volvemos a encontrar en estos tiempos más recientes un caso aún más singular con una titulación de grado con una de las notas de corte de selectividad más alta, como es el caso de Criminología ¿Tendrá algo que ver en esto la emisión de series como CSI en sus versiones de Miami, las Vegas, Los Ángeles o Nueva York, Mentes Criminales, Navy o El mentalista? Y qué decir de las listas de espera que tienen los centros de formación en Gastronomía y Cocina tras el éxito de Master Chef y Top Chef.
No conozco estudios al respecto que puedan confirmar estas coincidencias o que exista una correlación directa entre la emisión de estas series y el incremento en la elección de determinados estudios, pero cuando poco resulta curioso y quizás esta reflexión nos pueda hace pensar si debiéramos revisar que ven nuestros hijos en televisión.
Y sobre todo, ser conscientes como padres, que existen otras muchas variables que están afectando en una de las decisiones más determinante de sus vidas, por lo que antes de decirles “estudia lo que más te guste” debemos ayudarles a que conozcan la multitud de opciones que tienen a su alcance y que teniendo en cuenta que amigos, familiares, ídolos e incluso series de televisión les puedan influir, hayan conocido el máximo de opciones posibles para tomar la elección más acertada.
Hasta la próxima!
Nota del autor: Destaco este post porque es curioso que no se hagan estudios e investigaciones sobre esta relación de TV y elección de estudios
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